La verdadera abundancia y bienestar está en buscar la prosperidad en todas las facetas de tu vida, en el aspecto personal, familiar, profesional, laboral y social.
Constantemente escuchamos que la riqueza la medimos con base en el número de seis dígitos en la cuenta bancaria, específicamente en lo material; sin embargo, ésta va más allá, pues se encuentra en tu interior y se expresa mediante la actitud que tienes ante la vida y las circunstancias.
Riqueza quiere decir abundancia, y pobreza es igual a carencia, y normalmente son utilizadas para referirse a lo económico; sin embargo, el ser humano posee un patrimonio tanto interior como exterior, pero hasta ahora se ha enfocado en el segundo, aunque el primero es el que desempeña un papel crucial, ya que ésta siempre nos acompaña.
Para el filósofo griego Aristóteles, la felicidad no se alcanza con los bienes materiales, los cuales son instrumentos para alcanzar otro ideal, es decir, la riqueza material no hace que la persona sea feliz, sino que ésta se encuentre en un estado de confort. Por lo tanto, lo que debes buscar en ti es la riqueza emocional y espiritual, más allá de lo material y económico, porque no hay bien ni felicidad sin la actividad del alma.
Cualidades de la gente con riqueza interior
Las personas que poseen riqueza emocional entienden que las emociones son el motor de la motivación, por lo que es indispensable manejarlas si queremos ser felices, exitosos y atraer la riqueza económica.
Sus cualidades son:
Confianza en su valor como personas y no necesitan que los demás